PARA LOS ENAMORADOS

A pesar de los tiempos que vivimos, queridos lectores, el AMOR nos enciende siempre de brillos nuevos. Por eso, en el Día de los Enamorados, les regalo este poema de Luis Martínez Kleiss, deseándoles mucha, muchísima felicidad...

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TUS OJOS

Nunca me dicen tus labios
lo que me dicen tus ojos
que confiesan tus antojos
o descubren tus agravios,
que me glosan tu dolor
o me infunden tu alegría,
que me lloran tu agonía
o me inundan de tu amor...

Tienen tus ojos el don
de alegrarme... entristecerme...
consolarme... conmoverme...
y es... porque Tus Ojos son...
ojos que saben hablar...
ojos que saben herir...
y ojos que saben besar.
Ojos que hielan o abrazan
y que con nieve o con lumbre
dan o quitan pesadumbre
por dónde quieran que pasen.

Cuando de su limpia hondura
descorren ¡al fín! el velo
reflejan ¡la luz del cielo!
sobre el mar de tu ternura
y me hundo ¡felíz en él!
y tan dulce me parece,
que mi vida se adormece
en su piálaga de miel.

Cuando por ellos derramas
el fuego de tus amores...
yo me acerco a tus fulgores
para quemarme en sus llamas.
Ycuando lanzan destellos...
agudos como saetas
mis ojos son dos ascetas
que quieren clavarse en ellos.

Siento un placer inefable
si en tu mirada tranquila
descubro tras tus pupilas
un camino interminable...
Triste, medrosa... adivino,
con las flores de tu edén...
muchos abrojos también
a lo largo del camino.
Pero aunque guardes tus flores...
y me ofrezcas tus abrojos,
quiero internarme en tus ojos...
en busca de tus amores.

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Francisca Luján
Ilustración: JEM